San Juan del Río: Ahora sí, la guerra contra las adicciones está ganada (según el gobierno)

Con gran entusiasmo, el alcalde Roberto Cabrera Valencia anunció la firma de un convenio con el Gobierno del Estado para combatir las adicciones en el municipio. Porque, claro, nada frena mejor el consumo de drogas que una firma en un papel.

Bajo el paraguas del programa Querétaro, Al Grito de Paz, se planea brindar atención a personas con problemas de consumo, asegurando que la reincidencia en las adicciones sea cosa del pasado. Según el edil, esta iniciativa es una «gran alianza» entre el gobierno y los centros de rehabilitación.

El Consejo Municipal contra las Adicciones, que incluye a varios centros de rehabilitación y al DIF municipal, se ha comprometido a atender a quienes no pueden pagar tratamientos. Eso sí, el presupuesto aún no existe en cifras concretas, pero según el alcalde, «provendrá de alguna parte». Detalles menores, sin duda.

Según Cabrera Valencia, el cristal se ha convertido en una droga extremadamente popular, con cifras alarmantes proporcionadas por la CONADIC. Afortunadamente, en San Juan del Río las autoridades han decidido tomar cartas en el asunto.

Para resolver esta crisis, el alcalde propone una brillante idea: involucrar a empresas e industrias locales para que asuman parte de la responsabilidad. «Las empresas también se ven afectadas», afirmó, asumiendo que CANACINTRA y CANACO estarán ansiosas por invertir en una crisis que el gobierno no ha podido frenar en décadas.

También se habla de un sistema de «padrinaje empresarial» para financiar tratamientos. Es decir, que las empresas paguen lo que el gobierno no puede costear. Interesante estrategia.

En cuanto a la regulación de vapeadores, el edil aseguró que se acatará lo que indique COFEPRIS… cuando COFEPRIS diga cómo hacerlo. Mientras tanto, los vapeadores seguirán circulando libremente hasta que alguien decida lo contrario. Eso sí, en el discurso oficial ya está prohibido, que es lo que cuenta.

Para cerrar con broche de oro, el alcalde reafirmó su compromiso con un San Juan del Río libre de sustancias dañinas, con espacios saludables y un ambiente de bienestar. «Queremos ser un municipio modelo», declaró, sin especificar exactamente cuándo ni cómo.