El Monte de Piedad se quedó sin empeños… pero con banderas rojinegras
En San Juan del Río, la sucursal del Nacional Monte de Piedad cerró sus puertas, no por falta de clientes, sino porque sus trabajadores decidieron decir “¡hasta aquí!” y colgaron las banderas rojinegras que anuncian huelga.
El movimiento no es exclusivo del municipio: se trata de un paro nacional encabezado por el Sindicato Nacional de Empleados y Trabajadores del Monte de Piedad, que acusa a la nueva administración de hacer oídos sordos al contrato colectivo de trabajo y al convenio firmado en 2024.
“El acuerdo que levantó la huelga del año pasado se quedó en el cajón del olvido”, lamentó Miguel Ángel Pérez Ramírez, delegado de la sucursal 89, quien aseguró que la empresa no ha respetado ni los horarios de comida ni la publicación de vacantes, temas que ya se habían pactado.
Y por si fuera poco, los trabajadores denuncian que también hay acoso laboral, como si la presión del empeño no fuera suficiente. “Nos están empujando a renunciar, pero aquí seguimos, con la cabeza en alto y las banderas al viento”, comentó el delegado.
El conflicto estalló el primer minuto de octubre, y hasta ahora —dicen— nadie de la administración se ha dignado a sentarse a negociar. “Seguiremos en huelga, aunque se nos acabe el café”, advirtió Pérez Ramírez con tono firme.
Desde el comité nacional del sindicato insisten en que la intención no es afectar al público, sino exigir respeto a los derechos laborales. “No queremos pelear con la gente que viene a empeñar su cadena o su reloj; queremos pelear por lo que es justo”, subrayó.
Así que, por ahora, el Monte de Piedad en San Juan del Río se quedó en silencio… solo se escucha el ondear de las banderas rojinegras y el eco de una frase que resume el sentir de los empleados:
“¡No queremos más promesas, queremos respeto!”
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