Clausuran centro de rehabilitación que necesitaba… rehabilitación
Lo que debía ser un espacio para la recuperación de personas con problemas de adicciones terminó clausurado por las autoridades municipales, luego de que operara más como un vecino incómodo que como un centro de rehabilitación.
Vecinos reportaron que, lejos de la sobriedad esperada, en el lugar se escuchaban disturbios, bromas pesadas y hasta fiestecitas improvisadas. Tras estas quejas, el municipio montó un operativo con la presencia de Inspección de Comercio, Protección Civil, COMCA-DIF, Derechos Humanos, la Secretaría de Seguridad Pública y la Jurisdicción Sanitaria. Con ese desfile de dependencias, el diagnóstico fue contundente: el sitio no cumplía ni con lo básico para abrir sus puertas.
El inmueble carecía de licencia de funcionamiento, no tenía visto bueno de Protección Civil, le faltaba señalética, equipo contra incendios funcional y ni hablar de un programa de seguridad o de capacitaciones en primeros auxilios. Hasta los extintores estaban vencidos, como si hubieran estado de adorno.
En total, siete internos fueron encontrados y reubicados en un centro que sí cumple con las normas, bajo la vigilancia del DIF y Derechos Humanos, para tranquilidad de sus familiares. El responsable, en cambio, se quedó con un procedimiento administrativo que, como quien dice, también le servirá de terapia… pero burocrática.
Este fue el primer operativo de este tipo en la gestión actual de la Unidad de Protección Civil, aunque el DIF, a través del COMCA, ya avisó que seguirá de cerca a otros centros de rehabilitación del municipio. Porque, al final, de nada sirve predicar rehabilitación si el propio establecimiento necesita la suya.
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