Ricardo Astudillo se apunta rumbo a 2027… y mientras tanto, prohíbe tirar comida y meter jeeps al monte

Con 24 iniciativas bajo el brazo (y ya cuatro aprobadas), el diputado federal del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Ricardo Astudillo Suárez, anda más activo que nunca… y no solo en el Congreso, sino también en su ya nada discreta carrera rumbo a la gubernatura de Querétaro.

Entre sus “logros verdes”, Astudillo presume una reforma que prohíbe tirar comida en buen estado, obligando a restaurantes, comercios y mercados a canalizarla a comedores comunitarios. Adiós al desperdicio gourmet, y bienvenida la obligación de donar por ley. “Ya no es solo de buena voluntad, ahora es por ley”, dijo, mientras se relamía por el aplauso social.

Pero eso no es todo: también va contra los vehículos todoterreno que andan haciendo safaris en zonas protegidas. Si tienes una cuatrimoto lista para entrar al monte sin permiso, piénsalo dos veces: esta iniciativa también ya pasó comisión y va en serio. “No se trata de ser aguafiestas”, aclaró, “pero si vas a ensuciar el ecosistema, mínimo presenta tu plan de manejo”.

En gira por sus tierras de San Juan del Río y Amealco, el diputado recogió peticiones ciudadanas que van desde transparencia en tarifas de agua y libramientos urgentes, hasta apoyo para artesanos que quieren salir de la delegación… rumbo a Querétaro, a la CDMX o incluso al extranjero. Y como ejemplo, mostró con orgullo una marca de ropa local inspirada en la muñeca Lelé, que –literalmente– ya llegó hasta la presidenta de la República. Sí, le regaló una prenda y se la explicó él mismo. No se diga que no sabe hacer lobby con estilo.

Por si había dudas, ya levantó la mano (con todo y pancarta invisible) para ser el candidato del Partido Verde a la gubernatura en 2027. “Tengo la preparación y conozco perfectamente el estado”, dijo, casi en tono de casting. Y aunque el plan nacional es ir en coalición, él ya se placea como figura fuerte y bien posicionada. ¿Ego? No, seguridad, dice él.

En temas de partido, presumió que el Verde ya suma 22 mil militantes en Querétaro y la meta es doblar la cifra para 2027. Con cuadros en municipios como Tequisquiapan, San Joaquín o Ezequiel Montes, se dice listo para llenar las boletas de verde… y no solo por el color.

Y cuando se le preguntó por el polémico proyecto del Batán, en torno al agua, no se achicó. Reconoció que es un plan necesario, pero pidió dejarse de opiniones al aire y poner manos al dictamen. “Si no les gusta la tarifa, que lo revisen. Pero ya que se pongan a chambear”, soltó, con la diplomacia que solo da la certeza de que va en serio.

Así que mientras en el Congreso federal sigue presentando iniciativas, en lo local sigue posicionándose. Y no lo esconde: Ricardo Astudillo ya está en campaña… aunque diga que no lo está.