Estrena Canacintra San Juan del Río nuevo timonel: Víctor Hugo Rodríguez promete industria con sangre caliente y conciencia tranquila

Con aplausos, discursos y uno que otro codazo diplomático entre industriales, Víctor Hugo Rodríguez López tomó el volante de Canacintra San Juan del Río para el periodo 2025–2026, lanzando un mensaje claro: sí a la competitividad, sí a la tecnología… pero también sí a poner a las personas arriba de las gráficas y los PowerPoints.

“Las empresas no son fierros ni pólizas; son familias, sueldos y futuro”, dejó caer Rodríguez, recordando que detrás de cada estado financiero hay carne y hueso.

Kuri baja la advertencia: “No aflojen el billete”

El gobernador Mauricio Kuri González no perdió la ocasión para soltar una advertencia de calendario:

“El próximo año va a estar rudo; justo por eso es cuando hay que entrarle, no cuando ya pasó el susto”.

Kuri presumió que entregará el gobierno sin deuda en 2027, que Querétaro sigue en el top nacional de inversión extranjera y que la seguridad y la educación están por arriba del promedio. Luego puso la cereza tecnológica:

“Hace cuatro años nadie sabía si un texto lo escribió una persona o una inteligencia artificial… y miren ahora”, ironizó.

La herencia industrial no es cuento nuevo

El alcalde Roberto Cabrera Valencia aprovechó para recordar que San Juan del Río no se volvió industrial “por moda”, sino por vida entera: desde 1931 la ciudad produce, ensambla y exporta.

“Dices que eres de San Juan y de inmediato te preguntan por la fábrica”, dijo entre risas.

Rodríguez: crecer sí, pero sin olvidar al de abajo

El nuevo presidente adelantó que su administración se irá por la vía de vínculos con universidades, inclusión y sostenibilidad. Advirtió que hablar de éxito solo con números es receta para el autoengaño:

“La innovación sirve cuando no deja tirado a nadie. Si la sociedad se rezaga, la industria tarde o temprano lo paga”.

Mientras tanto, el dirigente saliente Manuel Rivadeneyra hizo entrega de una cámara “al día, en forma y con músculo”, según resumió en su despedida.

Rodríguez inicia así con el listón alto, con la vara del gobernador encima y con un mandato informal en los pasillos: hacer que Canacintra siga brillando… pero sin perder la humanidad en el proceso.