¡Cae la red del huachicol! Sheinbaum dice que nadie se salva, ni los de traje ni los de botas

La presidenta Claudia Sheinbaum no se anduvo por las ramas: el huachicol sigue vivo, pero esta vez lo tienen en la mira con lupa, microscopio y hasta rayos X. Con más de seis meses de chamba intensa, el Gabinete de Seguridad y la Fiscalía General de la República ya empezaron a destapar la cloaca, y lo que salió no es poca cosa.

Según la mandataria, no sólo encontraron combustible robado entrando por puertos —sí, de esos bien vigiladitos—, sino también por tierra. Pero ahí no termina el mitote: para que una red de este tamaño funcione, alguien con cargo y corbata tuvo que haber echado mano. Y sí, ya lo están investigando.

“Nadie va a ser encubierto”, soltó Sheinbaum con firmeza. “Si hay funcionarios metidos, se va a proceder.” Y es que no basta con agarrar a los que jalan la manguera en la madrugada, también hay que llegarle a los jefes, a los de cuello blanco que se hacen de la vista gorda… o cobran por cerrarla.

Pero la cosa se pone más jugosa: también se están rascando las cuentas bancarias. ¿Dónde termina ese dinero del huachicol? ¿Quién lo lava y cómo? La Secretaría de Hacienda ya se puso las pilas y está platicando con bancos, con el Banco de México, con la Comisión Bancaria y hasta con los gringos del Departamento del Tesoro. La meta: que no se les cuele ni un peso sucio al sistema financiero.

Y sobre la crítica que ya se le viene encima por el nuevo Poder Judicial que arranca en septiembre, Sheinbaum ya se adelantó con un guiño: “Va a funcionar mejor que el de ahora, mucho mejor.” ¿Optimismo o aviso para los que piensan que le echarán todo en cara a la 4T? Ya veremos.

Mientras tanto, el mensaje quedó claro: el huachicol no tiene futuro… y sus cómplices, tarde o temprano, tendrán nombre, apellido y ficha de investigación.