Sheinbaum nombra a Santiago Nieto para el INPI; México espera patentar la burocracia
En un sorprendente giro de los acontecimientos, la presidenta electa de México, Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, ha decidido que el mejor lugar para Santiago Nieto Castillo, conocido por su lucha contra la corrupción, es al frente del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (INPI). Sí, porque ¿quién mejor para proteger nuestras ideas que alguien que ha visto de todo?
Según fuentes imaginarias, Nieto planea revolucionar el INPI patentando conceptos tan innovadores como el «hilo negro» y el «agua tibia». Se rumorea que también buscará registrar la frase «no pasó nada», en honor a tantas conferencias matutinas.
En su anuncio, Sheinbaum destacó la capacidad de Nieto para encontrar cosas donde nadie más las ve. «Si pudo descubrir cuentas ocultas, seguro podrá encontrar patentes perdidas», afirmó mientras inauguraba la nueva oficina con cortinas antiespionaje.
Los círculos políticos y empresariales están más nerviosos que un político en campaña. Algunos temen que ahora tendrán que pagar regalías por cada promesa incumplida o que sus ideas para nuevos impuestos sean registradas a nombre del Estado.
Especialistas en propiedad industrial ven con buenos ojos su llegada, principalmente porque ya no tendrán que buscar novelas de ficción en las librerías; bastará con leer el diario oficial.
Con este primer nombramiento, Claudia Sheinbaum comienza a armar un equipo de gobierno que promete ser tan eficiente como un semáforo descompuesto. Los retos son muchos, pero al menos podremos decir que si algo no funciona, al menos está patentado.
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