¡Río Querétaro al spa! Autoridades prometen dejarlo como nuevo

El gobernador Mauricio Kuri reunió este lunes a todo un batallón de funcionarios y autoridades federales, estatales y municipales, con un solo objetivo: darle una manita de gato al Río Querétaro, que ya pedía auxilio a gritos. En Palacio de Gobierno se habló de afluentes, drenajes, y sobre todo, de coordinación (¡y no de colores políticos, eh!).

Entre los asistentes destacaron representantes de la CONAGUA, la CEA y los municipios de Corregidora, El Marqués, Huimilpan y Querétaro, todos dispuestos —al menos de palabra— a colaborar para sanear el maltrecho río que atraviesa la zona metropolitana.

Luis Alberto Vega Ricoy, titular de la CEA, sacó la carta de la esperanza técnica y detalló que los proyectos incluyen a grandes afluentes como el Sistema El Arenal, el río El Pueblito y Las Adjuntas, con el objetivo de que fluyan limpios y relucientes hacia el Río Querétaro. Agradeció a la Federación su respaldo, que según él, “ahora sí se ve más metida que nunca”. Vaya, algo se está moviendo en las aguas.

Por su parte, Gregorio Cruz Martínez, director de CONAGUA en Querétaro, no llegó con las manos vacías: anunció una bolsa de 47 millones de pesos ya autorizados, y dejó ver que ese monto se podrá duplicar gracias a la colaboración con la CEA y los municipios. Entre los planes inmediatos se incluye el desazolve de canales y la rehabilitación de cuatro presas del distrito de riego, que ya estaban echando telaraña.

Pero ahí no paró la cosa. La comisionada federal del proyecto de restauración de la Cuenca Lerma-Santiago, Claudia Gómez Godoy, le echó flores al enfoque queretano, afirmando que las acciones locales bien podrían convertir al Río Querétaro en el primero del país en ser restaurado al 100%. Sí, leyó usted bien: ¡al 100%!.

Gómez también mencionó la reforestación de riberas, creación de parques lineales y control a las industrias que, dicho con diplomacia, “tienen que hacer lo suyo” para no seguir soltando cochinadas al río.

El alcalde de Corregidora, Chepe Guerrero, tomó la palabra para agradecer el interés federal, y no perdió la oportunidad para comprometerse —en nombre de los alcaldes metropolitanos— a meter mano en serio en este tema. Porque, como él mismo dijo, ya no se trata solo de asegurar agua para todos, sino de rescatar los cuerpos hídricos urbanos, que hoy por hoy lucen más abandonados que promesa de campaña.